Antes de empezar a explicar y comentar los puntos más llamativos de los blunts, es preciso distinguir entre blunts y los blunt wraps.
Los blunts originales surgen dentro de la cultura del hip hop a principio de los años noventa, influenciado por varios raperos del sur de California. La idea era muy simple, abrir un puro para sacar la hoja o lámina más gruesa, la que sostiene el resto de hojas de tabaco (en caso de tener un buen puro), en otras ocasiones se vaciaba un puro, quitando el tabaco picado para introducir el cannabis y volverlo a cerrar. Los puros que más se usaban eran los de la marca Filis Blunt, por eso el nombre de “Blunt”.
Lo que logramos con Se solía reservar su consumo a ocasiones especiales, no era barato liar un blunt completo.
Ahora bien, esto no se parece mucho a lo que fuma nuestro amigo Snoop Lion actualmente, y se debe más que nada a la popularidad del producto, rápido muchas compañías vieron negocio en la fabricación de papel de tabaco para liar, pero no tardaron en darse cuenta de lo inestable que podía resultar un hoja de tabaco seco, el transporte y manipulación resultaba imposible, además de que no conservaban correctamente los aromas con los que se curaba el tabaco. Por lo que, lo más simple fue elaborar una pasta con tabaco picado (curado con determinadas fragancias, para que tenga cierto olor, a naranja por ejemplo) y añadir a esa pasta más aromas, para finalmente prensarlo en láminas, como hacer papel ecológico en casa. Así es como surgen los Blunt wraps. No tiene nada que ver fumarse uno de estos y fumarse un blunt original.
Lo bueno de los wraps, es que al final de todo el proceso tiene un olor bastante agradable y cierto sabor también. No obstante, unos cinco o seis minutos después de sacarlo del empaquetado ya no huele de forma tan intensa, son bastante delicados, al igual que las hojas de tabaco secas, los cambios de temperatura y humedad les afectan gravemente. Lo que no mucha gente sabe es que para volver a dejarlo otra vez flexible bastaría con aplicar un poco de agua o saliva para que el wrap o la hoja de tabaco vuelvan a ese estado de nuevo, con un pulverizador sería lo más recomendable.
Señalaba al principio que el consumo de un blunt se reservaba a una ocasión especial, ahora vemos una situación completamente diferente, ¡fumarse un blunt wrap está a la orden del día!
Un estudio del año pasado, realizado por los centros para control de enfermedades en Estados Unidos advirtió que el consumo de tabaco dejaba de caer. Y es que aunque parezca broma, muchos no saben que un blunt contiene nicotina o está elaborado con tabaco.
En 2010 se presentó una ley en Illinois para prohibir la venta de los blunt wraps, debido a que no existía una regulación clara y mucho menos tenían un control sobre los tipos de aromas y cantidad de nicotina. No son muy caros (en Estados Unidos, en España 1.50€) los jóvenes los consumen para imitar a sus estrellas y el de la gasolinera no tiene problema en venderle uno a un adolescente, siempre que pague los 99 centavos.
En España es más de lo mismo, a pesar de que aquí solo se puede vender en estancos al tratarse de un producto con tabaco. La realidad es muy diferente, vemos como muchos GrowShops, tiendas, asociaciones y gasolineras los venden. Y tu como consumidor responsable quieres hacer las cosas bien, vas a un estanco, el dependiente te mira con desprecio y te dice “No, no tenemos de eso, pero todos los universitarios porreros nos lo piden”, eso no es lo peor, lo peor es que después de la búsqueda épica, cuando por fin un chaval logra conseguir un blunt, no se le ocurre nada mejor que liar la marihuana o el hachís con tabaco,ojo cosa fina, nada de tabaco de liar, cigarrillos de Malboro, Lucky Strike o L&M si no tienen presupuesto, typical spanish.
Cuando fumamos un blunt la garganta, nariz y boca se irritan en gran medida, si no eres consumidor de tabaco seguramente te de una tos fuerte, a la larga puede generar problemas en los pulmones. No recomendaría su consumo diario, solo ocasiones especiales, cambia mucho las propiedades de la marihuana, apenas notas su sabor, lo que más se nota es el tabaco y cierto regusto al aroma añadido. Snoop Lion se fuma 80 blunts al día, en parte porque también tiene su marca propia y no existe mejor publicidad que esa. Vuelvo a repetir que su consumo debería reservarse para ocasiones especiales, más que nada una cuestión de salud.
